Historias de Carnaval: Dos vidas unidas

Hablar de Carnaval de Córdoba es hablar de ensayos, pasodobles, cuplés, "cantiñas" al amanecer en la esquina del Villa, cabalgata, ensayos generales, calle Montero, San Agustín, San Juan de Letrán o Juan Bernier, de Rosario, el número uno, el Patato, Rafalín Castilla, Miguel Amate, caja, bombo, pregón y pregonero, Plaza de la Corredera, Batalla de Coplas, Fernandito Abad, Pablo Castilla, cuenta atrás, Cabezones, grupos de la provincia, grupos de fuera, jurado, sultanas y sultanes, el Maestro, Ibañez, Awito, las niñas y las nenas, chirigotas infantiles, el ambigú en el teatro, la carpa durante el concurso, la Asociación,...y podríamos estar diciendo señas de identidad de nuestro carnaval durante párrafos. Pero decir Carnaval de Córdoba también es hablar de unión de dos vidas, de amor, respeto, sinceridad, confianza, estima, admiración, y de todo eso quiero hablar en esta entrada.

La Ley del Chamán

No quiero hacer de ella un texto "pasteloso", de peloteo a dos amigos. Solo pretendo dar a conocer, al que desconozca esta historia, lo que también hace el Carnaval. Y a todos los la conocemos desde hace años, tenerla siempre presente porque es algo bello, y sobre todo, sincero.
Todo comenzó hace ya más de nueve años, en 2003. Por un lado él, Roberto Rodríguez, "Rober" en el mundillo carnavalesco. Por otro lado ella, Sonia. El inicio de la historia, una apuesta, como no de carnaval. El primero apostaba por un primer premio en Cádiz de la comparsa Los Aprendices, de Tino Tovar. La segunda apostaba por Los Americanos de Juan Carlos Aragón. El premio: dar el primer beso. Sus dotes adivinatorias harían que apostaran por sendos 4º y 5º premio. La comparsa Guadalupe de Luis Rivero daría la sorpresa con el primer premio aquel año y la apuesta quedaría en el aire. Pero un escalón en la calle Alvar Rodríguez, cercana a la carnavalesca plaza San Juan de Letrán, sería el testigo de ese primer beso. Desde entonces la unión de estas dos personas parecía que llevara siglos, desde que nacieran. Y es que si un dato revela que ese amor es profundo, sincero y de verdad, es ese primer beso, porque ese beso Rober lo dió vestido de chamán, ya que era componente de la comparsa La Ley del Chamán,de su hermano Andrés Rodríguez y José Miguel Ibañez, segundo premio. Doy este dato porque el que recuerde el tipo de dicha comparsa, sabe que no estaba hecho para enamorar a nadie, y si con esas pintas Sonia aceptó aquel beso, no harían falta más razones para saber que es amor de verdad.

Sonia y Rober en su boda

Bromas aparte, los que tenemos el placer y orgullo de conocer a Rober y a Sonia, sabemos que están hechos el uno para el otro, que es como si llevaran toda la vida juntos, y que son la felicidad plena reflejada en una pareja. Sus miradas, sonrisas, sentido del humor, aficiones, e incluso profesión (ambos Maestros), son fiel reflejo de lo que digo. El pasodoble de la comparsa Los Americanos sobre el amor, ese mismo 2003, parece que en la frase "hay amores que estallan en carnavales", su autor pensaba en Sonia y en Rober. Estalló en carnavales, pero no ha dejado de crecer y dar luz. Y así llegó el pasado 12 de octubre, cuando ambos decidían darse el "si quiero". Una boda para dar fé de su amor al mundo, para compartirlo con amigos y familiares que siempre les han apoyado. Pero todos sabemos que no hacían falta ceremonias, "si quieros" o banquetes para que esta pareja diera testigo de su amor.
En aquella boda, amigos y compañeros de agrupaciones de Rober, le sorprendieron con un pasodoble hecho para la ocasión, escrito por su hermano Andrés, con la música de la chirigota Margarita se llama mi amor, conocida como "los pizzeros", hecha por Rober, que consiguiera el tercer premio en el año 2010. Os dejo el enlace de ese video, cuya letra refleja de verdad todo lo que yo he intentado explicar, y que Andrés supo hacerlo en tan breve espacio de tiempo.
http://www.youtube.com/watch?v=KzwCIwzybRk
No hace falta desearles felicidad, porque demuestran que lo son desde hace años, pero si deseamos que esa unión siga como hasta ahora y que sigamos siendo testigos directos de todo lo que nos tienen que dar aún. Enhorabuena de corazón.